En los últimos meses he empezado a ver por primera vez en muchos casos películas de los monstruos clásicos como Frankestein, El hombre invisible o La momia, al saber que este clasico se programaria en Sitges decidi reervarlo para esta ocasión y poder disfrutarlo en una pantalla grande y sonido (aunque sea el Prado es mucho mejor que el de mi casa).
El noble Larry Talbot vuelve a su pueblo natal después de varios años fuera. Desde su mansión se empieza a espiar a los vecinos y ve a Gwen dependienta en un anticuario, de la que queda prendido. Así que se va para la tienda e intenta ligar con ella, pero esta prometida y tiene que conformarse con comprarse un bastón con empuñadora con una cabeza de lobo de plata . Aunque esta casada, los dos se van juntos a una feria de zingaros y al marchar son atacados por una bestia a la que Talbot se enfrenta pero no puede evitar que muera una chica. En los siguientes días aparecen más victimas que parecen haber sido atacadas por un hombre lobo.
Esta película fundacional me ha gustado mucho, en ella se inician reglas básicas de los hombre lobo pero vemos que ha llegado modificadas a nuestros días, por ejemplo la transformación se produce solo con luna llena de otoño o la manera de acabar con un hombre lobo no se limita a la archifamosa bala de plata sino que también incluye un cuchillo y una empuñadura de bastón de este noble metal. A pesar de tener 80 años, los efectos de trasformación y maquillaje del hombre lobo son muy destacables. En otros aspectos el paso del tiempo es más evidente dándole ahora toque de comedia, como la relación entre la pareja (que no vemos en ningún momento que llegue a buen puerto pero lo sospechamos) o las tácticas de ligoteo de Talbot.
En resumen una película muy entretenida y además solo dura poco más de una hora.