Año. 2021
Duración: 93 min.
País: Irlanda
Dirección: Kate Dolan
Guion: Kate Dolan
Reparto: Hazel Doupe, Paul Reid, Ingrid Craigie, Carolyn Bracken, Jordanne Jones, Jade Jordan, Aoife Spratt, Miriam Devitt, Florence Adebambo, Katie White, Martin O'Sullivan, Colin Peppard, Madi O'Carroll.
Para elegir una película en ocasiones lo hago por lo que leo en redes sociales y en algunas simplemente por el póster, al estilo de videoclub cuando la caratula vendía películas. En este caso, la portada me llamo tanto la atención que decidí verla.
En el norte de Dublín la mamá de Char (Hazel Doupe) desaparece, pero cuando ella regresa a casa su extraño comportamiento hará que su hija sospeche que hay algo mal y en el proceso descubrirá los oscuros secretos de su familia.
El cine de terror irlandés suele sustentarse mucho en el folclore de dicho país, así que realmente uno ya sabe que esperar de esta clase de películas. Algo que puede ser bueno o malo según como lo vea cada quien, sobre todo porque tienen un estilo marcado que no es del agrado de todo el mundo y You Are Not My Mother ejemplifica perfectamente esto.
Gracias a que lo traído por Dolan es una historia que se cocina a fuego lento para ponerle más énfasis a la atmósfera y al silencio que a la acción en si, donde los personajes desde el primer instante muestran un lado depresivo basándose en expresiones de sufrimiento que en otra cosa. Algo que hace que los primeros 30/35 minutos sean bastante pesados debido a que realmente no pasa mucho y lo poco relevante que ocurre se sustenta en suposiciones, dejándole los reflectores a la complicada dinámica familiar.
Siendo hasta entrado el segundo acto cuando las acciones empiezan a tomar un toque siniestro, más no muy dinámico. El ritmo sigue siendo pesado, sin embargo, los elementos de terror empiezan a ser mejor utilizados para ir revelando el misterio detrás de la familia de una manera bastante correcta para mezclar temores reales con temores no tan tangibles y así ir exponiendo el peligro que representa su madre para Char. Aunque también hay que decir que esta última por momentos se ve arrastrada a situaciones que no llevan a ningún lado y además le crean una amistad que no se siente del todo bien construida.
Aún así la parte final no está mal. La sensación de peligro en este punto es considerable y, a pesar de que se siente cierta urgencia por poder encajar todas las piezas, si se logra ofrecer un desenlace con la fuerza suficiente como para que la amenaza sea un tanto aterradora y el resultado del conflicto no genere malestar.
Con respecto a las actuaciones tenemos a una Hazel Doupe que cumple con el protagónico, aunque es Carolyn Bracken (Angela) como su madre quien termina ofreciendo los momentos más destacados. Mientras que en producción hay buenas cosas: el trabajo de fotografía es sólido, la dirección de arte es sencilla, el score resulta agradable, el trabajo de sonido es limpio y todo lo referente a efectos/maquillaje resulta simple.
Aunque es un poco lenta me ha entretenido.