Año: 2022
Duración: 85 min.
País: Estados Unidos
Dirección: Ryûhei Kitamura
Guion: Christopher Jolley
Reparto: Stephen Dorff, Sabina Mach, Erika Ervin, Emile Hirsch, Jesse Kinser, Tyler Sanders, Vernon Wells, Tanner Zagarino
Ryûhei Kitamura es un director que cumple y sus películas siempre me parecen entretenidas, tanto sus inicios en en Japón con Azumi o Versus, como ya en Estados Unidos con títulos como Blanco perfecto (Downrange)o Nadie vive. Es un director que contando con presupuestos pequeños, siempre ha ofrecido su sello particular lleno de acción y violencia ofreciendolo en diferentes contextos argumentales. Ahora nos llega nuevo trabajo, que paso muy desapercibido en la sección Midnigth Extreme del último Festival de Sitges.
La película empieza con un atraco a una tienda de empeños que no sale bien y los atracadores se refugian en una apartada granja donde se encontraran una sorpresa...
En el primer tramo de la película estamos ante la típica película de atracos , una vez en la granja la película sigue esquemas habituales del género con desconfianzas, posibles traiciones... pero es en los últimos minutos donde tras un giro de guion la película se convierte en un festín de gore salvaje, donde cualquier parte del cuerpo puede ser cortada o reventada., una delicia para los aficionados del género o una desagradable sorpresa para los que esperaban acción más convencional.
Yo me lo he pasado genial, es corta, entretenida y tiene una explosión final por todo lo alto.