Hace unos años el anuncio de una quinta entrega de las aventuras de Indy lo cogí con cierto recelo después de la decepción que me supuso La calavera de cristal, ahora después de un rodaje que se alargo con accidente de Harrison Ford incluido por fin se estrena mundialmente ,después de su presentación en Cannes donde causo división de opiniones , y podemos comprobar que tal.
Tras una intro que se sitúa en 1944 en la que podemos ver a un rejuvenecido Indiana intentado rescatar varios tesoros arqueológicos del expolio nazi, la película se sitúa en 1969, con nuestro protagonista recién jubilado como profesor que recibe la visita de su ahijada (Phoebe Waller-Bridge ) que le habla del Antiquetera, un artilugio construido por Arquimedes que parece ser tiene un gran poder, por este motivo lo busca ella y también un exnazi que ahora trabaja para la Nasa. Su búsqueda , como es habitual en la saga, les hora vivir aventuras a lo largo de varios paises.
Pues fuera mis temores, me lo he pasado en grande, estamos en ante una película de aventuras muy entretenida, en la que no deja de pasar cosas en ningún momento, una tras otra, sin descanso. Tenemos a un Indy de cierta edad, y no se esconde ya que vemos que no es capaz de hacer algunas cosas. La película tiene los elementos típicos de la saga, un acompañante femenina y a un niño como los malos son nazis, el enemigo clásico. Pero también tenemos una película con emoción, intriga, sorpresas, traiciones, toques cómicos y momentos entrañables y que tocan la patata para los aficionados veteranos de la saga. La conclusión, argumentalmente es arriesgada y eso si muy original y totalmente inesperada, y a mi no me ha acabado de convencer, un pequeño pro que con el epilogo se olvida inmediatamente.
En resumen, pura diversión de principio a fin, que reconciliara a los aficionados de toda la vida y gustara a las nuevas generaciones. Como dicen en un momento de la película "Indiana Jones vuelve por todo lo alto para retirarse.